¿Por qué las empresas necesitan contratar empresas de gestión energética para sus negocios?
Los empresas de gestión energética (SGE) buscan la mejora continua en el uso de la energía haciéndola más eficiente, reduciendo el consumo, los gastos financieros relacionados y las emisiones de gases de efecto invernadero, y haciendo un mejor uso de las energías renovables. Estos métodos funcionan en conjunto con otras técnicas de gestión de calidad bien conocidas.
El papel del gestor energético se vuelve crítico para que una empresa cumpla sus objetivos de ahorro y eficiencia energética, así como sus obligaciones con el medio ambiente y la sociedad, y sobre cómo aumentar la competitividad de sus procesos de fabricación.
Con la ayuda del especialista adecuado, toda empresa, independientemente de su tipo o tamaño, puede optimizar sus gastos y consolidar sus compromisos.
Debido a su creciente complejidad, las funciones relacionadas con el suministro y consumo de energía, y en particular la necesidad de llevar a cabo una gestión energética eficaz para fomentar el ahorro de energía, consumen recursos importantes para una organización.
Las salvaguardias establecidas no son fortuitas ni involuntarias; están bien planeados. Solo de esta manera se puede utilizar la menor cantidad de energía manteniendo los niveles de confort (en los hogares) y los niveles de rendimiento (en las fábricas) que requieren las empresas.
Importancia de la gestión energética
La gestión energética es cada vez más frecuente en las empresas y administraciones públicas, desde los principios de la Responsabilidad Social Corporativa hasta el control del consumo para conseguir el ahorro energético o la contratación en los puntos de suministro.
Ya no es raro toparse con empresas que han implantado un sistema de gestión energética que incluye equipos de monitorización para garantizar que se optimiza la eficiencia energética de sus edificios. A continuación, algunas de las ventajas de la gestión energética:
1. La gestión energética impulsa la competitividad de una empresa
Al poder ofrecer los mismos productos o servicios a un coste de energía reducido, optimizar el uso de la energía hace que las empresas sean más competitivas. Además, cualquier tipo de gestión ambiental proporciona una imagen de marca positiva y puede convertirse en un factor diferenciador en la industria.
2. La empresa es consciente de cómo utiliza la energía
El primer paso para mejorar la eficiencia energética es comprender cómo se utiliza la energía, así como el potencial de ahorro y mejora. Esta autoconciencia es vital al tomar decisiones, incluso si son o no lucrativas para la organización en función de los costes de energía involucrados.
3. Cualquier organización, independientemente de su tamaño, puede apostar por la gestión energética
Ya que mejorar la eficiencia energética no es un lujo que solo puedan permitirse las empresas más grandes con mayores volúmenes económicos. Por el contrario, cualquier empresa, incluidas las pequeñas y medianas empresas, puede utilizar métodos para aumentar su eficiencia. Las medidas de ahorro, eficiencia y energía requieren un gasto financiero, pero debido a los ahorros realizados, la inversión generalmente se amortiza.
4.Mejora los procedimientos de la empresa
Al utilizar un sistema de gestión de la energía pueden entender cómo pueden mejorar sus procesos e instalaciones para aumentar la eficiencia energética y minimizar el consumo mediante un uso más inteligente de la energía.
5.No se traduce en un ahorro inmediato
Sino en un ahorro prolongado ya que como se mencionó, mejorar la eficiencia energética en una empresa u organización no debe ser un evento único, sino un proceso de mejora continua. Algo que se puede lograr diseñando un sistema de gestión de energía (SGE).
6.Contribuye al crecimiento económico
Debido a que uno de los gastos más significativos que deben asumir las empresas es la factura energética. Las empresas pueden volverse más competitivas bajándola, lo que tiene un impacto mundial beneficioso en la economía del país.
7.Algunos métodos de eficiencia energética son gratuitos
Promover comportamientos de ahorro y eficiencia energética entre los empleados es otra estrategia para reducir el desperdicio de energía. Apagar los ordenadores portátiles que no están en uso, no imprimir documentos según sea necesario y apagar las luces en las habitaciones desocupadas son gestos simples que se suman.
8.Es respetuoso con el medio ambiente
En una era en la que la energía se está volviendo cada vez más cara, es fundamental racionalizar el uso global de la energía para asegurar un futuro sostenible.
9.Reduce la dependencia de los combustibles fósiles
España es un país muy dependiente de la energía extranjera. Más del 70% del consumo total de energía final es importado. La reducción del gasto energético en las empresas puede ayudar a disminuir esta dependencia o, al menos, evitar que se expanda.